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El Rincón del Diablo

PERÚ: INVITADO ESPECIAL DE LA FERIA INTERNACIONAL DEL LIBRO EN CHILE

 

 

 

 

Para conocimiento de todos, el pasado año 2006, Perú fue el invitado especial de la Feria Internacional del Libro realizada en la urbe capitalina de Chile, evento que fue trascendente tanto en el vecino país del sur como en el resto de Latinoamérica, y donde, además de ser invitado de manera especial, el Perú expuso lo último de su producción literaria, dando muestras de que la literatura en nuestro país se mantiene vigente y con miras hacia un futuro promisorio.

Éste fue, sin lugar a dudas, el evento que más destacó el año 2006, no obstante ser realizado en otro país, donde la literatura mantiene aún un lugar elevado en los medios de comunicación y la sociedad en general. Pero lo que más ha impactado de su desarrollo ha sido la participación activa de autores nacionales en ella y su eficaz desempeño alrededor de los días que ésta se mantuvo.

Los diarios y revistas chilenas fijaron sus ojos, antes y después de la Feria, en la Literatura Peruana, y sacaron sobre aquello numerosos artículos que acapararon parte de muchas de sus publicaciones. Imagen que, por cierto, nos da mucho qué pensar en cuanto al trabajo de difusión literaria y cultural en nuestro país. Cosas así (el interés de la prensa y la sociedad misma en actividades que involucran a su proceso cultural) poco se ven en el medio nacional. Una muestra de mis palabras, ya para cerrar este breve artículo que celebra la participación por todo lo alto del Perú en la Feria Internacional del Libro en Chile, van a continuación, en este artículo recogido de la revista chilena Cosmopolitan:   

 

 

 

"PASAJEROS PERDURABLES"

 

 

Esta antología de cuentos de autores peruanos es una excelente puerta de entrada para una narrativa que, a pesar de la vecindad física, conocemos muy poco.

 

 

El país invitado a la Feria del Libro de Santiago fue Perú. Probablemente debido a esa circunstancia llegó a las librerías chilenas la antología Pasajeros perdurables. Historias de escritores viajeros, editada por Seix Barral en Lima. La selección y el prólogo pertenecen a Iván Thays, uno de los visitantes, e incluye cuentos de otros escritores peruanos que pasaron por esta ciudad como Santiago Roncagliolo, Alonso Cueto, Rocío Silva Santisteban y Fernando Iwasaki. Están además Julio Ramón Ribeyro y Alfredo Bryce Echenique (Vargas Llosa no, porque no escribe cuentos)* y representantes de las generaciones más jóvenes.

La selección de Thays tiene como hilo conductor el exilio, entendido en sus dos dimensiones: el extrañamiento real, físico, del país de origen, o el exilio interior, el aislamiento en la soledad. Más allá de la provocadora frase que abre el prólogo ("al parecer, sólo existe una forma de ser escritor peruano: vivir en el exilio"), el autor tiene razón en cuanto a que en torno a este tema "muchos de estos narradores encuentran su mejor tono". La antología se convierte así en una excelente puerta de entrada para una narrativa que conocemos muy poco; los cuentos seleccionados muestran efectivamente una literatura viva, inquieta y perdurable, cuya mirada encuentra un territorio común tanto en el extrañamiento como en situar el punto focal desde la periferia sudamericana, dicho sea sin la menor intención de ofender a nadie: nada como el viaje y la sensación del exilio no sólo para avivar los sentidos, como dice Thays, sino también para situarnos de manera realista en el mapa cultural, económico y político del mundo.

Estos cuentos transcurren en diferentes latitudes, aunque más en Francia y España que en México o Estados Unidos (y uno en Chile, muy gracioso y revelador: Vacaciones en el Hyatt, de Roncagliolo) y en distintas épocas; aún así, la línea temática refuerza la identidad común de los autores y la antología alcanza no sólo un nivel de calidad que rara vez desmerece, sino también una destacable unidad de sentido.

 

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(*) Importante es recalcar que Vargas Llosa sí escribió un libro de cuentos (Los Jefes, 1959), pero no con la temática que Pasajeros perdurables requería para aquella selección. Es por tal razón que no se le incluyó, no precisamente porque su obra abarque más el ámbito novelístico.  

 

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